Rompiendo Fronteras

Cuando viajamos no conocemos de fronteras. Eso es lo lindo de viajar.

Viajar nos conecta con los otros. Nos acerca a otras culturas.

Nos vincula a otras personas y a otras mil maneras de ver el mundo. 

Nos vuelve un poquito más empáticos, un poquito más respetuosos. 

Y por qué no, un poquito más hermanos. 

De alguna manera nos une. De hecho, es más lo que nos une que aquello que nos separa. 

Viajar nos derrumba las barreras. Nos esfuma los prejuicios. 

Cuando viajamos atravesamos las fronteras. Y las atravesamos por completo.

Viajar nos vuelve un poquito menos patriotas, en el mejor de los sentidos. 

Y si viajando valoramos más nuestra casa, respetamos aún más la del otro. 

Porque viajando cobra valor lo importante. 

Importa menos tomar la mejor foto y más hacerlo bien acompañado. 

Y si viajando me alejo de mi casa es solo para acercarme un poco más al mundo.

Porque cuando viajamos no conocemos de fronteras. Y eso es lo lindo de viajar.